¿Alguna vez has sentido la necesidad de tener una conversación difícil con alguien, pero no sabes cómo hacerlo? Puede que hubo una situación que te ofendió y necesitas comunicar tus sentimientos. Puede que tienes que hablar con alguien para comunicarle tus límites de una manera amable. A lo mejor tuviste un desacuerdo con un amigo o familiar y no estás seguro de cómo resolverlo. Sea cual sea el caso, espero que estos tips te ayuden para tener una comunicación asertiva con las personas que te rodean. Mientras que esto no es un estudio exhaustivo, espero sea útil para ti. El tener buenas relaciones con los demás es algo que está en el corazón de Dios, y creo que la buena comunicación está al centro de esto. Bien, ¿cómo podemos tener una buena comunicación con los que nos rodean?
Reconoce que tú eres responsable por ti mismo
Muchas veces cuando se trata de comunicarnos (especialmente sobre algo que nos frustra, duele o molesta) esperamos que la otra persona arregle la situación. Antes de que podamos llegar a un acuerdo, debemos reconocer que nosotros mismos somos los únicos responsables por lo que nosotros hacemos y decimos. Podemos reaccionar a lo que otros hacen o dicen, pero al fin de todo nosotros somos los que deciden cómo vamos a reaccionar. Recuerda esto: Eres una persona poderosa y responsable. Danny Silk dice lo siguiente:
"No controlo a los demás, pero en un buen día puedo controlarme y manejarme en presencia de otros".
Habla en el momento adecuado
Si estás cansado, tienes hambre, has tenido un día largo, te sientes frustrado o enojado, etc., este no es el tiempo de tener una conversación importante. Espera a que estés en un lugar bueno física y emocionalmente y también asegúrate de que sea un buen momento para hablar con la otra persona. Puede que primero debas descansar o comer antes de poder comunicarte efectivamente. También asegúrate de que puedas dedicar el tiempo necesario para la conversación. Si solo tienes 5 minutos y la conversación requiere 15, este no es el mejor momento. Quieres estar totalmente presente así como quisieras que la otra persona esté totalmente presente.
Habla desde un lugar de amor
Si no te estás comunicando desde un lugar de amor por esa persona, la conversación no va a tener muy buenos resultados. Espera hablar hasta que puedas hacerlo con amor y respeto y permanece con esa actitud.
Piensa en ganar/ganar
Piensa en ganar/ganar (ambos somos poderosos) no en ganar/perder (yo gano, tú pierdes), perder/ganar (soy una víctima), perder/perder (lo destruiré todo). -Stephen R. Covey, Los siete hábitos de la gente altamente efectiva.
Busca primero comprender y luego ser comprendido.
Esto lo dice Stephen R. Covey en Los siete hábitos de la gente altamente eficaces.
Dann Farrelly dice que el propósito de la comunicación es compartir nuestro corazón, escuchar el corazón de la otra persona y crear un nuevo normal.
Conéctate primero y luego, si es necesario, ofrece contenido.
La mayoría de las veces, el primer paso es la conexión. El contenido viene después. Debemos buscar fomentar una relación más fuerte con esa persona, esa es nuestra meta. Primero debemos trabajar en nuestra conexión y luego podemos trabajar en resolver el conflicto y llegar a un compromiso. Primero buscamos crear conexión y luego examinamos lo que se está diciendo. Recuerda: Nuestra meta es primero entender y luego ser entendidos.
Elige bien tus palabras y clarifica tus dudas
Puede que la persona con la que estés hablando entienda las cosas de otra manera. A lo mejor no fue lo que dijiste que causó el problema, sino la manera en que la otra persona lo interpretó (o vice versa). Si no estás seguro de que estás entendiendo o te estás dando a entender, puedes usar esta frase: Me pregunto si... ("Me pregunto si entendí bien lo que quisiste decir" o "Me pregunto si me expliqué bien".)
Siempre puedes repetir lo que la persona dijo en tus propias palabras o pedirle que repita lo que tú estás diciendo para así aclarar cualquier malentendido.
Utiliza frases con "yo".
No quieres ser abstracto. Tampoco quieres sonar acusatorio ("Tú siempre haces esto" o "Tú nunca cambias"). Dan Farrelly dice lo siguiente:
Con un mensaje "yo", el emisor asume la responsabilidad (se apropia) del mensaje y hace saber a la otra persona los sentimientos que su comportamiento o respuesta ha despertado en ella (de los que puede o no ser directamente responsable).
Para ayudarte, puedes usar la siguiente formula:
"Yo me siento ______ cuando _____ porque _____."
Ejemplo: "Me siento frustrado (enfadado y asustado) cuando no lavas los platos después de haber dicho que lo harías porque parece ser un patrón y se siente que yo no cuento".
La Biblia valora la buena comunicación
La blanda respuesta quita la ira; Mas la palabra áspera hace subir el furor. (Proverbios 15:1, RV60)
El hombre se alegra con la respuesta de su boca; Y la palabra a su tiempo, ¡cuán buena es! (Proverbios 15:23, RV60)
El corazón del sabio hace prudente su boca, Y añade gracia a sus labios. (Proverbios 16:23, RV60)
El que ahorra sus palabras tiene sabiduría; De espíritu prudente es el hombre entendido. (Proverbios 17:27, RV60)
Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes. (Efesios 4:29, RV60)
Hay tanto que se pudiera decir sobre este tema, y esto solo es el inicio. Aun así, creo que estas claves son esenciales para aprender a fomentar una comunicación asertiva con los demás. Este tema es valioso para Dios y espero que las claves compartidas sean de ayuda para ti y tus relaciones.
Nota: La mayor parte de estas notas fueron tomadas y adaptadas de una clase dada por Dann Farrelly llamada "Comunicación Valiente".
Puntos Clave
Reconoce tu responsabilidad en la comunicación, siendo consciente de que eres responsable de tus palabras y acciones.
Elige el momento adecuado para conversaciones importantes, asegurando bienestar emocional y físico.
Comunícate desde un lugar de amor y respeto hacia la otra persona.
Adopta una mentalidad de ganar/ganar, buscando resultados beneficiosos para ambas partes.
Prioriza entender antes que ser entendido.
Enfócate en construir conexión antes de abordar el conflicto o la resolución.
Utiliza declaraciones con "yo" para expresar sentimientos y pensamientos, asumiendo la responsabilidad del mensaje.
Selecciona cuidadosamente las palabras y aclara dudas para evitar malentendidos.
Recuerda la sabiduría bíblica que destaca la importancia de la comunicación gentil, oportuna y edificante.
Considera la comunicación como compartir tú corazón, escuchar el corazón de la persona, y crear una nueva normalidad.